¿Porque el regreso de los flamencos anuncia equilibrio en la puna catamarqueña?

Con la llegada de la primavera, el Salar Tres Quebradas vuelve a llenarse de vida con el retorno de las tres especies de flamencos altoandinos: Parina Grande, Parina Chica y Flamenco Austral. Estas majestuosas aves regresan a las lagunas de altura para alimentarse y reproducirse, dando inicio a un nuevo ciclo natural en uno de los ecosistemas más singulares del planeta.

Los flamencos son bioindicadores, es decir, reflejan la salud del ecosistema. Su retorno al Salar Tres Quebradas demuestra que las lagunas mantienen buena calidad de agua, alimento y condiciones naturales para su reproducción. Cuando los flamencos vuelven, es señal de que la Puna está en equilibrio ambiental.

Desde Zijin-Liex destacaron el valor ecológico de la zona y reafirmaron su compromiso con la protección y monitoreo de la biodiversidad, a través de campañas científicas que permiten conocer y cuidar las poblaciones de estas especies.

Los monitoreos realizados muestran una tendencia positiva durante las estaciones cálidas, cuando los flamencos se observan en lagunas como Aparejos, Verde, Azul, Negra y Tres Quebradas, dentro del Área Natural Protegida Subsitio Ramsar Sur.

La empresa sostiene que la coexistencia entre la actividad minera y la conservación ambiental es posible mediante una gestión sostenible, basada en la evidencia y el respeto por la naturaleza.